Mientras el calendario nacional se mantiene intacto, en nuestra provincia, el 24 de septiembre es un día de celebración, orgullo y recuerdo. Esta fecha fue declarada feriado provincial en el marco del avance más importante en la lucha por la independencia. Este hito ocurrió justamente en nuestra localidad y ese fue el triunfo en la Batalla de Tucumán.

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El Ejército del Norte, liderado por Manuel Belgrano, apenas contaba con 3600 hombres, mientras que el ejército Real del Alto Perú, al mando de Pío Tristán contaba con 7000 hombres, un escenario desalentador para el contendiente nacional. Pero la estrategia del líder, el ímpetu de de gauchos tucumanos y salteños y una confusa y enigmática lluvia de langostas mantuvieron vivo el anhelo por la independencia en un momento crítico.

¿Por qué es feriado en Tucumán el 24 de septiembre?

Así es que en el aniversario 213° de la Batalla de Tucumán, librada el 24 de septiembre de 1812, celebramos en Tucumán este episodio clave en la historia argentina, el cual fue fundamental para consolidar la Revolución de Mayo y luego declarar la soberanía nacional cuatro años después en la misma provincia que vio las hazañas de Belgrano y su ejército criollo en el Campo de las Carreras.

En conmemoración a la Batalla de Tucumán, el 24 de septiembre fue declarado feriado provincial. Así es que en nuestro territorio no hay actividad laboral y los servicios municipales y provinciales como la administración pública, las escuelas, la Asistencia Pública, la recolección de residuos y la Dirección de Respuesta Rápida mantendrán restringidos sus servicios en esta jornada.

¿Qué pasó el 24 de septiembre en Tucumán?

El 24 de septiembre de 1812, Tucumán fue el escenario del fervor nacional, la convicción y el compromiso con una nación que peligraba en cada paso por el derrotero hacia la independencia. Luego de abandonar la provincia de Jujuy, el Ejército del norte, junto a los abnegados jujeños y otros patriotas de la región, recorrieron más de 360 kilómetros hasta Tucumán, dejando atrás tierras inutilizadas, abandonando y destruyendo sus hogares en pos de un propósito mayor: la soberanía nacional.

Al llegar a Tucumán, Belgrano fue recibido por una población comprometida a luchar por la independencia. El 24 llegó el día. Las fuerzas patriotas y realistas se enfrentaron en el Campo de las Carreras en nuestra provincia donde el ideal de la libertad dio el impulso al ejército patriota para ganar una batalla donde los mismos eran inferiores. Con cargas frontales y flanqueos, desorganizaron las fuerzas de Tristán, ayudados por la aparición de una manga de langostas que la tradición popular le atribuyó a la Virgen de la Merced, a quien Belgrano había encomendado su agrupación.

Esta batalla no solo detuvo el avance realista hacia el norte del actual territorio argentino, sino que también marcó un punto de inflexión en la guerra por la independencia, alimentando la esperanza de que la causa patriota era viable.